En que nos hemos convertido

Un conocido colega blogger nos bardea porque no hicimos el obituario al guitarrista Les Paul. Falleció a los 94 años, fue un gran colaborador en el desarollo de la guitarra electrica, invento el multipista y fue un guitarrista groso de jazz, y podría seguir escribiendo. No lo hice, ni lo haré. Puse un tweet cortito al respecto, y nada más.

En mi cuenta de bloglines tengo 142 feeds de distintos sitios, blogs, magazines, etc. Siempre lo dejo bastante vacío e intento leer todo. A veces pienso en cuanto leo por día de ellos… alguien debe haber hecho una estadística de cuanto lee uno por Internet, pero deben ser decenas y decenas de páginas por día. Pienso que tal vez con solamente el feed de Metafilter podría mantenerme más que entretenido. Me pongo a concentrarme en lo que leí ayer, y realmente no recuerdo nada en particular.
Sin embargo soy incapaz de leer un puto libro. Me avergüenza horrores, me hace mal. Cuando estuve engripado, semi en cama, pude leer La Hierba Roja, de Boris Vian, que lo tuve por leer desde hace ya dos años. Solo soy capaz de leer cuando estoy extremadamente ocioso. En una época de desempleado, me leí como 5 libros de borges. Despues con algun esfuerzo y en otras vacaciones leí un poco más, pero hasta ahi. Da pena. Pero mientras, tengo los links interesantes de la wiki.

En mi carpeta de música, tengo otra carpeta llamada «2009». En ningún otro año habia hecho eso, pero ahí tengo todos los discos nuevos que me he bajado de este año. Son 44 discos. Hay solo un par que escuche más de 5 veces, y hay bastantes que nunca termine de escuchar directamente. Ahora estoy intentando escuchar el nuevo de Yo La Tengo, que se supone que es mi banda favorita, por tercera vez.

¿Podría seguir, no? Cuantas veces habré escrito un post de 2 lineas con unos links cagados a la wikipedia. Los discos sin escuchar. Saqué un disco hace unos días. Trabaje un año y medio en él y fue de las cosas que más esfuerzo me costó en mi vida. Esta para bajar gratis. Se con ninguna preocupación que muchas de las personas que lo bajaron lo tienen ahí, en su carpeta de Downloads, descansando en su zip, sin abrir. Muchos de ellos quizás ni lo escuchen. Otros escuchen unos temas, les guste, o no, y lo dejen por ahí. No me parece mal. Yo también lo hago. Pienso en el Quaristice, último disco de Autechre que son 22 temas cortos, muy complejos, que requieren muchísima atención y que parece al mismo tiempo un disco muy disfrutable. No se si algún día le pueda entrar.

Hay varias notas que salieron en los últimos meses, que consideran que quizás estamos pensando distinto, al tener este nuevo paradigma de asimilar información en sms, twits, estados de facebook, comments, pequeños posteos de párrafos. Bloggers que dicen estar perdiendo su habilidad de concentrarse en cosas más largas y elaboradas. Que nuestros cerebros se estan adaptando a estas costumbres. Quizás sea una exageración, y solo sean hábitos, y hay que leer más libros, escuchar más discos, en vinilo o en cd, sentado en un sillón, concentrándose solo en eso. Mientras acá estoy, escribiendo esto, mientras trabajo, escucho un disco, y me salta un amigo chateando y gotean twits desde el plug-in de firefox ese tan lindo, que me permite tener al twitter en la esquina del browser, porque es mucho más cómodo.


La Fiesta de la Niebla

El sábado fui a una fiesta organizada por la gente de Esquizodelia Records, donde tocaron varias bandas, adentro había estufa a leña, y afuera una niebla increíble y muchísimo frío. Aproveche, y llevé la cámara y saqué algunas fotos.

Bogo es una banda bastante difícil de definir. Una especie de post-punk enfermo, con arreglos ‘circenses’ y algunas raíces hardcore y punk. Algo así como la banda sonora del asilo de Arkham, con el guasón riéndose atado en chaleco de fuerza. El cantante era muy bueno, gritando agudo de una forma súper sacada y muy rítmica. De a ratos, recordaban a los Liars. Y daban bastante miedo.

(Bogo)

Uoh! podrían ser catalogados como una banda post-rock, aunque están lentamente torciendo y rompiendo los límites del género. Habrán tocado tres temas, pero los últimos dos eran DENSÍSIMOS, y climáticamente lograron pasar de un clima bastante agradable a algo oscurísimo y pesado de una forma sutil y lenta. El final de su show fue casi Drone Metal, colgado y muy violento, dejando una atmósfera negra y pegajosa en la casa.


(Uoh!)

Los argentinos de Pommez eran tres, y trajeron un montón de instrumentos. Teclados, bajos, guitarras, cambiaron de instrumentos muy seguido pero nunca parecía innecesario y lo hacían muy efectivamente. Tocaron a oscuras (ergo imposible sacar fotos), en algunos ratos sonaban a unos Radiohead instrumentales y más creativos, por momentos se iban a un lado más fantasmagórico y tribal (los 3 miembros tocando percusión, dos de ellos tarareando melodias). Se notaba que tenían un lenguaje propio, y que lo habían desarrollado muy bien y por los caminos adecuados.

De 3Pecados no se si puedo hablar mucho (trabajé bastante con ellos y son demasiado amigos y compañeros de banda). Tocaron muy, muy poco, como es (lamentablemente) común. Los temas nuevos son buenísimos, especialmente una balada triste, llamada ‘ella nunca te amará’. Continuando a las otras bandas, el clima fue para abajo.


(3Pecados)

Cerraron los Fiesta Animal, que están cambiando lentamente de dirección desde las últimas veces que los vi. Dejaron un parte la parte de ‘Fiesta’ para ser oscuridad total, entre un Throbbing Gristle y el Flowers of Romance, de Public Image Ltd. O sea: Todo Mal (tm). Tienen una nueva integrante, Gaby, que esta aportando muchísimo y le agrega una capa nueva, extraña y disonante a los temas. Los FA se están volviendo expertos en generar climas densos, hasta lograr detener el tiempo. Lo hacen muy, muy bien, aunque no es para cualquiera, y a veces pecan de cierta irregularidad. En este show no fue el caso.

Pero tanta oscuridad fue demasiado. Con pequeñas excepciones, casi todos los shows de las bandas fueron instrumentales, oscuros y densos. Creo que me fuí con un ligero malestar físico de tanta mala onda, y necesitado de escuchar una progresión chota de sol y do, un estribillo común y silvestre. Y eso me hace pensar en otras bandas montevideanas, y creo que el 95% entran en la categoría de «oscuras». Quizás es una reacción hacía el «Rock Uruguayo», ese pop-rock-punk-para-arriba que ocupa las FMs. O más bien que el apodo de «Ciudad Gris» le queda demasiado bien a Montevideo.


Una vez vi «The Breakfast Club» con una chica a la que le pareció mediocre y aburrida. Creo que nunca entendi porque odiaba todo lo bueno de la vida de ese modo y, por otro lado, si habiamos visto la misma película.

So long, John.


The Band In Hell.

Electric Six es un caso bastante extraño. Una banda que surgió (casi, casi) como una broma, con canciones completamente desfachatadas, humor sardónico y combinación de funk, disco, rock y electrónica. Oriundos de Detroit, que mucho tiene que ver con su sonido, con su combinación de hedonismo y cinismo, con su sensación de banda sucia, pobre, bardera, tuvieron sus quince minutos en el sol con “Gay Bar” y “Danger High Voltage”, dos canciones de sexualidad y jolgorio duro y continuo, de alucinante bailable en la que hombres mostachudos, posibles constructores de autos, terminaban en bares oscuros levantando “mujeres salvajes” y travestis. La combinación de rock grasa, duro, con la voz de Dick Valentine, que parece una caricatura de la masculinidad, y su humor de macho emasculado, más un beat completamente bailable, les permitió tener un par de hits que parecían el summun de lo efímero y pasajero.

Luego de ello, obviamente, aquellos que deciden que es lo que importa dejaron de prestarles atención. Nadie podía tener un interés sobrehumano por una bandita de cuarta que parecía una versión dura de Right Said Fred. Pero Lo Curioso, como a veces sucede en el mundo del pop, es el modo en que con esos elementos que hacían de “Danger High Voltage” un hit irresistible (el humor sarcástico y acido, la voz y la personalidad de Valentine, la combinación de música bailable y rock) han terminado conformando una banda con la que cualquiera de nosotros estaría honrado de bailar. Electric Six continúo sacando discos, y se convirtió, por otro lado, en una banda política en la cual la política tiene el mismo nivel de importancia que una noche en un bar gay, una banda política que por su completa falta de declaraciones altisonantes convierte su burla sarcástica en algo mucho más desollador que cualquier otro grupo con conciencia. En algún momento dije que habían hecho el comentario más punzante de la era Bush (tantas cosas se han explicado por “la era Bush” que me da un poco de dolor escribirlo) mientras pasaban por completos idiotas. Es una exageración, por supuesto, pero es notorio el modo en que los ES (y sobre todo su líder, alma y voz del proyecto) lograron poner en evidencia algo que las demás bandas de rock que de golpe amanecieron con “El Capital” en su mesa de luz entre el 2003 y el 2008 ni percibieron. Mientras la mayoría de los grupos “políticos” se centraban en la corrupción y la percibida maldad, los ES se concentraron en algo mucho más banal y quizás más terrorífico: la estupidez. La increíble, galopante, dogmatica, gigantesca, desesperante estupidez de alguien como George Bush y todo el sistema que lo apañaba.

Es que, en realidad, a Dick Valentine siempre le preocupó la increíble idiotez del mundo: las preocupaciones vanidosas de los hombres respecto a su miembro, el sistema cerrado de estupidez que conforma el mundo de la celebridad, la vacuidad femenina impulsada por la salvaje imagen, la cultura que ha terminado haciendo que todos nos preocupemos por lo grosero, la pequeña denuncia, el escándalo sórdido, la hipocresía, la ventaja chiquita, la destrucción de todo impulso por ser mejores. Todos nos hemos visto, parecemos gusanos a los que les han extirpado el sentido de la responsabilidad. Marchamos por la vida sin una preocupación, lo suficientemente inconscientes como para notar que estamos mal. Hoy en día es cada vez más cierto eso de “we all in the game, yo”.

Hay algunos símbolos en el imaginario de Valentine que se repiten obsesivamente: los hombres y mujeres de sexualidad dudosa (o, quizás, un continuo placer por subvertir los roles de género, por los hombres vulnerables y las mujeres devoradoras), los presidentes norteamericanos, el demonio, lo marcial, la guerra nuclear (lo cual nos hace sonreír: parece un miedo tan anacrónico), el futuro, el baile. Asimismo, la música de Electric Six es furiosamente nocturna: sintetizadores grasas de bar de strippers, guitarras gordas y cocainómanas, pianolas malditas con el swing, baterías que retumban en tu cabeza. Y encima de todo esa voz gruesa y tan poco atractiva (en el sentido clásico), de whisky, de putas, de enano maldito a lo Ian Dury.

Por ello y por mucho más, este breve tributo, un grandes éxitos concebido solo en mi cabeza, donde encontraran canciones sobre: Jimmy Carter (el presidente norteamericano más perdedor) y los Backstreet Boys (una balada!), los dealers, una invasión alemana a México, parejas lesbianas y rockeras, sintetizadores de otro planeta (en una de las más bellas canciones de futurismo redentor), la versión evolucionada de Patrick Bateman, Lenny Kravitz, rednecks, la cocaína (en una de esas canciones geniales en las que se grita “solo!” inmediatamente antes del mismo), comandantes del baile y el amor, sobre todo mucho amor.

Electric Six – Dance, Satan, Dance!

01. Electric Demons (Fire)
02. Devil Nights (Señor Smoke)
03. Kukuxumusu (I Shall Exterminate Everything Around Me That Restricts Me From Being The Master)
04. I Buy The Drugs (Switzerland)
05. Fabulous People (I Shall Exterminate Everything Around Me That Restricts Me From Being The Master)
06. We Were Witchy Witchy Women (Flashy)
07. Rock And Roll Evacuation (Señor Smoke)
08. White Train (I Shall Exterminate Everything Around Me That Restricts Me From Being The Master)
09. I Wish This Song Was Louder (Switzerland)
10. Jimmy Carter (Señor Smoke)
11. When I Get To The Green Building (I Shall Exterminate Everything Around Me That Restricts Me From Being The Master)
12. Germans In Mexico (Switzerland)
13. Your Heat Is Rising (Flashy)
14. Dance Commander (Fire)
15. Flashy Man (Flashy)
16. Gay Bar (Fire)
17. Lenny Kravitz (I Shall Exterminate Everything Around Me That Restricts Me From Being The Master)
18. Mr. Woman (Switzerland)
19. Danger! High Voltage! (Fire)
20. Future Boys (Señor Smoke)
21. Dance Pattern (I Shall Exterminate Everything Around Me That Restricts Me From Being The Master)
22. Future Is In The Future (Señor Smoke)
23. Making Progress (Flashy)
24. Synthesizer (Fire)