1) Hace un par de meses, recuerdo haber chateado con Amadeo que me comento que se fue a unas cabañas de vacaciones. En esa estadía se llevaron un reproductor de CD común y corriente y varios discos. Me comentó con tremenda alegría «¡¡Que bueno volver a escuchar Cds de nuevo!! De comienzo al fin!! Que discazo que es en realidad ‘Fear of Music’ de los Talking Heads!!»
2) Hace unas semanas, charlaba con la más que estimada F.F que me comentaba que hace tiempo que no tenia ningún disco que le enganchara. Recordaba periodos obsesionada con álbumes, que los escuchaba una y otra vez, que uno recordaba cada bosquejo, cada fragmento y cada nota de cada instrumento. Me siento familiar con esa sensación de ‘devorar’ un álbum. Me pregunta si me pasa lo mismo, y yo le dije que en realidad últimamente estoy más que nada enganchado con canciones sueltas, a veces 2 o 3 por artistas, a veces solo una, que escucho sin cesar, repetidamente, durante semanas o meses.
Mi objetivo con estos dos casos no es la ya trillada nostalgia de ‘Oh que ha pasado con los viejos tiempos cuando escuchábamos menos música pero la escuchábamos mejor’ que ya se ha repetido hasta el hartazgo. Sino es una asociación de conceptos para llegar a un factor, tal vez obvio, que causa el porque escuchamos música como escuchamos. Hablo justamente, del Medio.
– Rebobinando un poco en el tiempo, recordemos a el cassette. No voy a referirme a su copia y a la perdida de valor de la unidad, sino a otra cosa, su uso, que en realidad no cambia mucho de lo que en realidad era el vinilo. Play, y arranca, podes rebobinar o avanzar (quizás mas molesto que moverl a pua para elegir un tema que el vinilo). Otra característica es la posibilidad de poder armar tu propio cassette, con tus temas predilectos, lo cual también cambia la forma en que uno puede escuchar la música. Cada cassette seguía siendo una unidad, aunque en el caso del mixtape, uno podía modificarla.
– El CD! En el cd la mayor diferencia (además de, bueno, la calidad del audio) era que uno podia pasar digitalmente entre tema y tema. ¡Genial!
– La PC y el audio digital : Tanta vuelta y solo quería llegar a esto. Además de la compresión, acceso via internet de archivos, hay dos cosas más para agregar
· Los reproductores de audio: Podes armar una playlist en segundos, escuchar los temas que te interesan, subir, bajar temas, ordenar todo instantáneamente
· La PC como la biblioteca de música más cómoda del mundo: ¿Te aburriste de un tema? Queres escuchar otro? No hay necesidad de buscar entre discos, sacar un disco, poner otro, buscar el tema para escucharlo. Tampoco de buscar el cassette donde esta, rebobinarlo, o simplemente joderse por que ese cassette mil veces grabado que antes tuvo Alice in Chains y luego tuvo Portishead y Massive Attack se quedaron en lo de tu ex. Ahora, con una PC con 100 Gigas de mp3s, y con los reproductores con funciones de search, uno en 3 clicks cagados escucha de nuevo lo que le gusta.
Obviamente si hablo de este punto como algo despectivo soy el hipócrita del siglo: El último CD que me compre fue en el 2004 (creo) y antes de ese fue en el 2001. Siempre me jacté de la comodidad de escuchar música en la PC, tener todos los temas ahi, ordenados, y cualquier cosa, si no da el espacio, en un CD lleno de mp3s o incluso en un DVD donde entran muchos, muchos álbumes. Pero sin duda con esa comodidad se pierde ese ‘algo’ que Amadeo tanto revivió cuando volvió al Huevito y a sus CDs.