Bailando sobre Arquitectura

– Descubrí a The Necks hace más o menos 3 meses, y desde que los conocí pensé en escribir sobre ellos, recomendándolos y tratando de explicar por qué son tan buenos. Las semanas pasaron y ese post se fue aplazando. Llegó al punto en que ayer, luego de ver mi lista de tareas pendientes con el inamovible «post sobre The Necks en EBM» ahí esperando, me pregunté «¿Por qué me está costando tanto escribir sobre música?». ¿Por qué, el acto de recomendar una banda que no es precisamente nueva, se siente como algo anticuado, viejo, innecesario?

– Hace mucho no escribo sobre música. Hace mucho no leo sobre música. Me puse a pensar. Ok, es mentira, leí sobre música, pero e como diferente. He leído los últimos posts de Jotafrisco, sobre Yeezus de Kanye West y sobre James Ferraro, pero son otra cosa, ¿No? Hablan de música, pero hablan al mismo tiempo de fenómenos culturales, de lo que está ocurriendo ahora con personas que están moldeando el panorama musical.

– Sí, es re mentira que no leo nada de música. Bah, al menos no leo reseñas. Hace años que ni se me ocurre pasar por Pitchfork a ver qué onda, aunque sea de curiosidad semi-morbosa para ver que es lo último In o Trendy que está ocurriendo. Pero si leí, por ejemplo, decenas de notas sobre Random Access Memories, el último disco de ya-saben-quienes. Pero no leí notas sobre precisamente su música, sino sobre todo lo que ocurrió alrededor de ese álbum: su efecto en la industria musical, cómo fue producido y grabado, lo nostálgico que es, el hecho de que unos artistas electrónicos hayan hecho un disco tan absurdamente rockista, etc. Llegué a pensar que disfrutaba más leer de ese disco que escucharlo. Se escribieron GRANDES notas, como esta en Create Digital Music,  y esta de la revista Spin.

– Tal vez me cuesta tanto escribir sobre música estas conversaciones:

«che, conocés a The Necks?»
«no, que onda..»
«y, son un grupo australiano, instrumental, medio experimental..»
«mmm, a ver, recomendame un disco»
«Drive By está bueno»
«a ver..»
(lo busca en youtube, lo encuentra, da play, escucha)
«..mirá, está bueno»

– A ver: Yo pongo un embed de YouTube acá. Considerando que tienen una buena conexión, ¿Cuanto tiempo tardan en escucharla? ¿5 segundos? ¿Menos? No hay que descargar nada. No hay que pasar un archivo. Cuanto tiempo tardás en saber las bandas similares a The Necks? Los buscás en last.fm. Lees en la Wikipedia sobre ellos. Y la banda está desde los 90s! Que carajo voy a aportar yo, como Humilde Bloguero Uruguayo?

– Mientras tanto, Amadeo y yo cada vez escribimos más sobre series y películas. Quizás en el cine todavía no se perdió el evento de «el estreno» o de «ver la película». ¿Hace cuanto no esperás el release de un disco? Es necesaria la promoción increíble y carísima de Daft Punk para generar hype? Es necesaria la búsqueda del tesoro ridícula y para niños de los Boards of Canada para que se les de bola? ¿O es que, simplemente, nos estamos volviendo viejos? O es solo mi experiencia personal, como persona que escucha y también hace y trabaja con música?

Bueno, ta.

The Necks es un grupo australiano de música instrumental. Son un trío de jazz – bajo, batería y piano – aunque no hacen jazz, o hacen una versión de jazz muy rara que no se parece mucho a nada y haría que los echen de cualquier jam session común y silvestre. Los discos de Necks tienen una o dos improvisaciones, jams larguísimos, lentos, piezas que evolucionan y se transforman con una serenidad total. Los tres integrantes de The Necks son los músicos más pacientes del universo, y no tienen ningún reparo en estar tocando el mismo motivo repetitivo durante 20 minutos hasta que suceda algo.

– Está el cliché bastante pedorro de criticar al jazz como música para músicos, que da placer más para sus interpretes que para los espectadores. En el caso de The Necks se la podría definir como música para la música misma, teniendo fe en que las hebras rítmicas y melódicas se van construyendo y armando naturalmente. Cada disco, cada show, es una improvisación total, una composición en vivo que se construye despacio, basada en motivos sencillos y repetitivos. No hay nada relajado ni natural. Es pura concentración y el ego de los músicos se cancela totalmente. Podes ir a un show de The Necks en vivo y ver al baterista solamente tocar un plato durante todo el show y dejar el resto de su instrumento juntando polvo.

– ¿Y a qué se parece lo que hacen? Y bueno, un poco a los últimos discos de Talk Talk, de los que ya hablé bastante. Un poco a Tortoise, a Godspeed you Black Emperor sin el rock y el apocalípsis. A los jams relajadísimos de Yo La Tengo. Pero igual son difíciles de encasillar, por que para su formato,  logran una cantidad de matices admirable: Tienen discos que rozan el New Age y el Ambient, otros que se acercan más a la cacofonía del Free Jazz, otros donde dejan el contrabajo y el piano y lo reemplazan por guitarra eléctrica o sintetizadores. Tienen discos con invitados, donde suenan más como una banda de rock noir, donde Nick Cave podría entrar a cantar en cualquier momento. En otras improvisaciones, lo que hacen roza la música contemporánea académica, trancados en bucles atonales incómodos y perturbadores. A veces una improvisación arranca atonal y termina en una serena marea ambiental y melódica. Otras veces, ocurre exactamente lo opuesto.

– Verlos en vivo en YouTube es muy simpático: Más de 20 años tocando, las mismas 3 personas, cada vez que tocan haciendo algo totalmente diferente. Los ves ahora, más viejos, y bastante más pelados, y siguen haciendo lo mismo. Y son lo opuesto exacto a una banda de jazz, o de blues, o de cualquier otro género donde solo se repiten patrones con comodidad. Estos tres tipos están siempre jugando, y siempre creando.

– Discos recomendados? Para comenzar quizás el mejor es Chemist, ya que son 3 piezas no tan largas y bastante ágiles y variadas. Después me gustan más cuando están clásicos (léase, contrabajo batería y piano, sin mucha más vuelta), como en Piano Bass Drums y Silverwater. Drive By es muy bueno también, Mindset a veces rodea lo avant-garde y cacofónico pero se vuelve cada vez más musical, Aquatic es su disco más ambient y sereno. Es buscar en el Soulseek y descargar. Aunque ya se que están todos perdidos y solamente van a buscarlos en Youtube, manga de vagos modernos y tecnológicos. Busquen y vean que tal.


3 comentarios en “Bailando sobre Arquitectura

  1. salvador

    Gran recomendación. Los estoy escuchando por primera vez. «Aquatic» es el disco por donde empecé y, desde el primer minuto, quedé totalmente enganchado. Un pedazo de banda.

  2. Ward

    Sé que no es lo mismo, pero a quienes disfrutaron con esos climas instrumentales made in Oceania, les recomiendo «Armed Courage», el último EP de los neozelandeses The Dead C.

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